domingo, 20 de abril de 2014

3 segundos después de masturbarme...

...soy la piel de un quemado, la pastilla en la boca de un esquizofrénico. Una bala encasquillada entre la pistola y la sien. Un andén, sin trenes ni vías... una falta de ortografía escondida entre diccionarios.

Soy una luciérnaga, que ya no espera encendida que bailen los enamorados. Un estado cuántico de embriaguez absoluta. La ruta que toman los desahuciados por el hambre, y el mismo alambre que les corta aunque no quieran...

Soy una sala de espera a corazón abierto y un desierto en el que ha pesar de todo, no ha dejado de llover. Un edén sin manzana. Una promesa a las cuatro de la mañana. El cigarrillo de después. Una voz lejana...

... tres segundos antes de desaparecer.