sábado, 13 de septiembre de 2014

Chapero

Obedece el instinto, que nunca perdió de todo el control.

Mientras, me violo a mi mismo
repitiendo mi error.
Una. Y otra. Y otra.

El instinto no se acuerda de usar condón.

Después, una sensación morada,
de papel billete.
Uno. Y otro. Y otro.

Vender la piel siempre ha salido caro.

Más tarde, una estadística electoral comienza
a contar votos.
Uno. Y otro. Y otro.

Nos llaman mayoría silenciosa.

Por el contrario, «La Razón» lo tiene
claro: Abstinentes antisistema
en la última planta del bloque izquierda
del Virgen de las Nieves.


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