En la universidad…
*Valdrá más tu DNI que tu nombre... si no te lo sabías, tranquilo, lo aprenderás.
*El café, la coca-cola, el red bull (y derivados) pasarán a ser tus más habituales compañeros de batalla
*Te darán ataques de pánico en la víspera de los exámenes, y dirás “¿Por qué no me metí en Bellas Artes, Dios mío?” (si eres de letras) o “¿Por qué no me metería yo en una de letras, Dios mío? (si eres de ciencias)
*Te darás cuenta de que estudiar no es lo tuyo… porque lo tuyo es la vida bohemia!!!
*Tendrás días de motivación y días en los que querrás matar a alguien con los apuntes.
*Todos tus exámenes coinciden, misteriosamente, con las fiestas de tu pueblo.
*Si tu mejor amig@ está en tu clase empezará a llevarse justo con los que no puedes ni ver, y si está en otra carrera, se llevará con gente que tú (por rumores en tu facultad) sabes que son lo peor de lo peor.
*Pasarás semanas intentando meterte en la cabeza montañas de apuntes para después intentar borrarlos a base de calimocho y vodka de 4€ del Mercadona.
*Tendrás extraños cambios de humor a lo largo del cuatrimestre.
*Todo el mundo se enterará de tus notas antes que tú, sobre todo si es un enorme SUSPENSO (la velocidad del chisme dependerá de cuan baja sea la nota que saques)
*La idea de comer bien pasó a mejor vida.
*Cuando estudias te vuelves inmensamente creativo: en un intento de desviar la mente de los apuntes, puedes llegar a planear desde qué te vas a poner el viernes hasta la dominación del universo.
*Te cuestionarás si tienes algún ligero retraso mental, porque curiosamente, alguien que ha estudiado la mitad que tú saca más nota.
*Después de estudiar todos los apuntes que dio el profesor en clase, llegas al examen y la primera pregunta es de la guía didáctica: sí, aquella guía que el profesor jamás mencionó en clase, sacada de aquella bibliografía de la que nunca oíste hablar.
*Te darás cuenta de que un test no es un test si no es multirrespuesta (restando por fallos, como no)
*Los días de los demás deben tener 26 horas, porque lo que es a ti, no te da tiempo de hacer todo eso.
*No es que te vuelvas vago… más bien te vuelves inconstante.
*”Mañana tengo el examen… dentro de 10 minutos empiezo…”
*Odiarás el plan Bolonia
*El profesor de tal asignatura te va a coger cariño y se va a empeñar en que la suspendas y no la recuperes hasta el final de la carrera (para seguir viéndote, claro)
*Tu letra sufrirá una horrorosa transformación.
*¿Te acuerdas de cuando los veranos duraban 3 largos meses?
*Siempre que tengas que imprimir un trabajo la impresora de la reprografía estará rota.
*Aprenderás a fingir que sabes algo que no sabes.
*Te darás cuenta de que si el saber no ocupa lugar es porque según entra información, sale otra más vieja.
*Vas a empezar la carrera siendo un crío y la acabarás casi a punto de jubilarte.
*De pronto vas a empezar a reírte por tonterías… hoy no habré estudiado mucho, pero lo que es reírme…
*Van a amenazarte con echarte de la biblioteca un par de veces.
*¡Qué bonito es ver amanecer con los apuntes en la mano!
*Vas a necesitar dinero… mucho.
*Vas a darte cuenta de que hay mucha variedad de gente por el mundo (si habías perdido tu capacidad de sorprenderte, la vas a recuperar)
**Y todo esto en la mejor etapa de nuestras vidas… Pues ala! A disfrutarla!! =)
1 comentario:
Pero tranquilo, no te preocupes tanto, que este año estoy en el comité de novatadas... buajajajaja
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