Aquí, tan desde abajo, tan cerca de la tierra
relamo el palpitar de tu cuidado
y centro mi delicia en el transcurso.
No es de extrañar que el mundo sea redondo.
¿Qué forma iba a adoptar, sino la de mi boca?
relamo el palpitar de tu cuidado
y centro mi delicia en el transcurso.
No es de extrañar que el mundo sea redondo.
¿Qué forma iba a adoptar, sino la de mi boca?
No hay comentarios:
Publicar un comentario